Casi cada semana recibo uno o dos mensajes de phishing en mi cuenta de Twitter. No únicamente de phishing se vive, dicen algunos… Por esa misma razón se ha de agudizar la intuición y aprovecho la ocasión para enseñároslo.
Es muy atractivo recibir un mensaje privado por Twitter donde te indiquen un enlace hacia una foto en la que casualmente apareces y hacer clic en él, pero ¿desde cuándo un desconocido se va a molestar en todo ello? Aunque no fuera un desconocido, tu propia familia o pareja, ¿picarías el anzuelo?
Este tipo de prácticas no sólo ocurren en Twitter, cualquier red social accesible está potencialmente en peligro. Los riesgos que pones a disposición de ellos son:
- Todos tus datos personales de la cuenta.
- Acceso a mensajes directos a todos tus contactos.
- Expandir el riesgo entre tus contactos.
- SPAM.
- Multiplicar el riesgo con las extensiones hacia otras redes sociales.
Si usas un buen navegador, como puede ser Google Chrome, te ayudará en estos casos que piques con un mensaje de advertencia. Aún así, no siempre verás este mensaje de advertencia, como indico en mi breve artículo Inseguridad en las redes sociales, todas estas advertencias ocurren cuando ya les ha sucedido a varios usuarios y exponen sus quejas a las diferentes empresas.
Como todo avance en la innovación, Google provee de una herramienta interna que analiza exponencialmente todas las webs en busca de virus, troyanos, phishing, malware, etc. para proteger al usuario.
Sé precavido, desconfía de cualquier objeto y usa la cabeza 🙂
